En un país donde la delincuencia organizada opera dejando en una década más de 50 mil nacionales muertos a causa de enfrentamientos, el jueves 19 de noviembre el Senado de la República aprobó en todo el país la regulación y despenalización del uso lúdico, industrial y medicinal de la marihuana, dictamen que ha sido turnado a la Cámara de Diputados, que tiene un plazo de hasta el 15 diciembre para revisarla y aprobarla o rechazarla. La legislación contempla la posesión en casa de hasta ocho plantitas para consumo personal y fue aprobada con 82 votos a favor, 13 en contra y dos abstenciones.
Con ello, los consumidores podrán transportar hasta 27 gramos; a partir de los 28 gramos y hasta los 200, la nueva legislación contempla sanciones económicas y más de los 200 gramos, amerita cárcel. Las sanciones administrativas pueden ir desde los 5,200 pesos mexicanos (unos 255 USD) hasta los casi 261,000 pesos (unos 13,000 USD), así como la clausura de asociaciones donde se permitirá el consumo de marihuana (estos grupos podrán tener hasta 20 integrantes), pero queda prohibido el consumo de cannabis psicoactivo en áreas de trabajo públicas o privadas.
El uso lúdico como medicinal de la yerba es tan importante que hasta se ha creado un Instituto Mexicano para la Regulación y Control del Cannabis, Imerecca, que iniciará operaciones en 2022, y que será un órgano desconcentrado de la Secretaría de Salud y tendrá un director general que será nombrado y removido libremente por el titular de dicha dependencia.
Este organismo regulará además la comercialización e incluso la exportación e importación, según ha dado a conocer el presidente de la Comisión de Salud del Senado, el morenista Miguel Ángel Navarro y, lo que nos faltaba, hasta México Unido Contra la Delincuencia llegó ha crear un Hashtag #CannabisConPermiso, mediante el cual brinda las herramientas para obtener un permiso para uso adulto de cannabis que incluya adquisición de semilla, siembra, cosecha, transformación y transporte.
“La ley es de avanzada, es progresista, no era ya posible mantenerlo en la oscuridad. México hace lo correcto”, ha llegado a decir Ricardo Monreal, coordinador de Morena, el partido de la mayoría que, en buena medida, consumó la decisión senatorial; o bien “Es un hito histórico”, como afirmó el senador Miguel Ángel Mancera, del opositor PRD. Con esta aprobación, México se suma a los países que ya la han despenalizado, sin embargo, dicen los escépticos que la nueva norma podría crear el mercado de cannabis más grande del mundo; esto en un país cada vez más azotado por la violencia ligada a los cárteles de la droga.
En Baja California y en todo México, por ejemplo, desde 2017 la marihuana medicinal había sido técnica y legalmente aprobada a nivel federal, pero realmente el marco jurídico y la orientación práctica para las jurisdicciones locales que permitirían a los pacientes poseerla, nunca fueron ultimados por el equivalente mexicano de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos y la Secretaría de Salud. En la propuesta de Ley Federal para la Regulación del Cannabis no se habla de “consumo lúdico” ni “recreativo”, sino de “consumo adulto” y, hasta el momento, el uso de la marihuana medicinal sigue siendo un tabú social.
No sé si usted sepa, pero en la Alcaldía Benito Juárez, Cdmx, se han venido realizando cenas clandestinas con marihuana en algo que hasta el año pasado se llamaba “Cannivore”, un exitoso club cannábico que promueve la cultura del consumo de marihuana, sus beneficios y advierte de sus implicaciones. A una de estas cenas asistió Erick E. Tapia (gq.com.mx 12/junio/2019) y Alejandra Carbajal, fotógrafa, donde hacen una interesante recreación desde cómo son anunciadas, y hasta la forma en que se desarrolla esta glamorosa cena suigéneris para unos 14 invitados, que –esa ocasión– amenizó un trio de jazz.
“Para que una cena cannábica alcance su potencial se requiere ciencia. Las dosis y la selección del menú son estudiados cuidadosamente. El componente psicoactivo de la cena es una infusión de THC (tetrahidrocannabinol) preparada con aceite de aguacate y plantas de marihuana seleccionadas por su alta calidad para que garanticen la concentración que se requiere. Su preparación toma entre 6 y 7 horas e implica varios procesos para obtener un líquido puro y potente”[1], señala la publicación. Un texto altamente recomendable.
[1] https://www.gq.com.mx/estilo-de-vida/articulo/cennas-canabicas-clandestinas-ciudad-de-mexico
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