Sí. El tiempo no perdona. El próximo mes de agosto (2025) se cumplen treinta años de cuando este reportero vio por último a la poeta Pita Amor en la casa Museo de León Trosky; y si no fuera por el homenaje que este 5 de junio se realizó en el espacio “Mujeres en la historia” que presenta Angélica Noemí Juárez Pérez, (subsecretaria de Educación Básica de la SEP) no se hubieran revuelto los recuerdos. Fue en el homenaje que realizó el pintor Luis de la Selva y quien invitó al amigo, escultor y artista plástico Jorge Ismael Rodríguez y quien a su vez corrió la invitación a este, entonces joven y bohemio periodista.

Anteriormente, este autor había conocido a Pita Amor, de manera fugaz, cuando asistía a un edificio de Plaza Río de Janeiro en la colonia Roma, hermoso departamento, a “corregir” un libro del literato chileno Valdemar Verdugo Fuentes quien fuera discípulo en 1970, en su estancia en Argentina, del literato Jorge Luis Borges y quien estaba terminando su libro “En Voz de Borges», que recogía entrevistas y conversaciones con el escritor, ofreciendo una visión íntima y cercana de Borges.

En la reunión homenaje a Pita Amor, agosto de 1995, en la casa museo Trosky, se recuerda en una nota de la extinta (casi igual que la nota) Notimex, que la poetisa leyó una oda que escribió para ‘su amiga, siempre negada, Carmen Mondragón, mejor conocida como Nahui Ollin’ y que entre otras cosas decía:

“A Nahui Ollin

la tolteca princesa de siete velos

emperatriz del pincel y reina de los colores

alcaldesa del dibujo, de la línea

profesora de los contornos

maestra y reina de la armonía

tu pintaste la poesía

Nahui gran abadesa

es inmortal tu grandeza”

(escrito el 21 enero 1993)

La muestra en comento estuvo integrada por quince cuadros, entre los que destacaban retratos de fecha reciente, realizados por Martha Chapa, Olga Donde y Gabriel Ruiz Burgos. Así como «Ofrenda viva a Pita Amor» de Luis de la Selva, «Alas de la poesía» de Isabel Burgoa Llano, una serie de inspiraciones sobre su creación poética realizados por Salvador López, Javier Morales, Ernesto Ceceña y el montaje de instalaciones estuvo a cargo del amigo Jorge Ismael Rodríguez.

Aquella ocasión, recuerdo, un joven que era erudito de la obra de Pita Amor llegó con ella empujando una silla de ruedas al museo. Jorge Ismael Rodríguez había arribado con una cámara colgada al cuello. Antes de empezar a recitar la oda, Pita Amor nos pidió que por favor las fotos que le hiciéramos no fueran con flash.

Luis de la Selva (hoy difunto), habría dicho a Notimex que la vida de Pita Amor “la equiparo a la de Nahui Ollin, al decir que ambas ‘se conservan porque el tiempo no las destruye’. Ellas son aún el reflejo de la mujer libre de atavismos y complejos femeninos, mujeres auténticas que han provocado polémica al retar a la sociedad con sus creaciones. Que descubrieron esa parte apasionada casi animal de su interior, y vivieron tragedias similares… hasta el grado de que ellas mismas buscan su aislamiento».

“¡Tómame una foto con Pita!” dijo Jorge Ismael a quien esto escribe, al momento que me entregaba su cámara fotográfica. ¡Claro! Respondí. Pero al hacerlo olvidé desactivar el Flash y muy molesta, Pita Amor me lanza un bastonazo que −por fortuna no me alcanzó−. Sobraban las disculpas y el mismo público se expresó molesto al respecto. VER VIDEO

Enhorabuena a la sección mujeres en la historia de las Conferencias del Pueblo.