Como todos sabemos, por iniciativa del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, en México, el 7 de noviembre de 2003 fue proclamada ‘Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad’ la festividad indígena del “Día de Muertos” y, por ello, los futuros maestros de la Unidad Nezahualcóyotl 152 de la Universidad Pedagógica Nacional realizaron este 29 de octubre (2024) un gran festival para rescatar de la cultura popular esta gran fiesta del pueblo mexicano.

Según los historiadores, el “Día de Muertos” tiene su origen en las raíces indígenas de las culturas autóctonas de Mesoamérica y, que finalmente llegaron a fusionarse con las creencias católicas vertidas tras la conquista, para dar lugar a una festividad que sigue evolucionando con el paso del tiempo, y que se ha convertido en un real culto a la muerte con vestigios de lo que era muy común entre las culturas prehispánicas.
Según la prestigiada cadena de televisión CNN, en México, la muerte ha sido motivo de celebración con “coloridos altares, panteones iluminados, calles tapizadas de anaranjado con la flor de cempasúchil, comida, bebida, música, calaveras y catrinas, todo esto para honrar la memoria de los que ya no están”, y efectivamente todo esto estuvo presente tanto en el altar de muertos que pusieron en uno de los salones los alumnos de la UPN.
Cada sociedad −consigna la nota de Rocío Muñoz Ledo en CNN (30 octubre, 2022) − afronta la muerte de maneras diferentes, pero los mexicanos lo hacen de una forma muy particular. Son varios días de fiesta y ritual para recordar a seres queridos y familiares cuyas almas, según la costumbre, vuelven por una noche a compartir con el mundo de los vivos. “Todo comienza a finales de octubre, pasando por el 1 de noviembre, dedicado al alma de los niños, para terminar el 2 de noviembre, recordando el espíritu de los adultos”.
“Y para recordarlos y recibirlos en su regreso al mundo terrenal para compartir con los vivos se montan altares llenos de colores, sabores y olores: flores de cempasúchil, calaveras de azúcar y chocolate, pan de muerto, agua, velas, fruta, vino, mole y toda la comida y bebida favorita de nuestros antepasados”[1].

“Contrario a la idea popular extendida y aceptada en México, escribe Víctor Joel Santos Ramírez, en su especial publicado en Inah.mx, el ‘Día de Muertos’ no es de origen prehispánico y en sentido estricto tampoco es producto de un sincretismo indígena y europeo. En efecto, las festividades de los días 1 y 2 de noviembre (no confundir con las prácticas y celebraciones funerarias ancestrales mesoamericanas cuyas características eran otras y se realizaban en fechas distintas), tuvieron su origen en la Europa medieval, fueron instituidos por la Iglesia católica —el día 1 de noviembre— para celebrar a “Todos los Santos”; es decir, a los beatos y canonizados, pero principalmente a los santos desconocidos (los millares de mártires cristianos), para que ninguno se quedara sin fiesta y así reunidos en un solo día, correspondieran a este homenaje intercediendo con mayor fuerza en la oración y en las súplicas de los creyentes, mientras que —el 2 de noviembre—, Día de los “Fieles Difuntos”, como su nombre lo indica, fue dedicado a quienes “reposan en Cristo”, pero no alcanzaron la vida beatífica (el cielo), debido a que fallecieron sin haber cumplido las penitencias que les fueron impuestas en vida o fueron insuficientemente cumplidas, así como a quienes mantuvieron apego a la vida material”.
Las almas de estos difuntos (de acuerdo con la escatología cristiana), se hallan en el Purgatorio, esta fecha fue concedida para que los vivos, a través de oraciones, súplicas y sufragios ayuden a estas almas a limpiar sus pecados y así logren su salvación. Las misas del 2 de noviembre tenían el carácter de indulgencia plenaria aplicable a las almas del purgatorio”[2] dice Santos Ramírez.
El día de Todos los Santos fue instituido el 13 de mayo por el Papa Bonifacio IV en el año 609, para honrar a los protectores de la Iglesia, pero también para contrarrestar al paganismo, ya que el Papa consagró en este día el antiguo templo del panteón romano (el Panteón de Agripa), en la Iglesia de Santa María de los Mártires (conocida como Santa María la Redonda por su planta circular). Sin embargo, esta celebración tuvo que cambiar de fecha debido a que: “Como era muchísima la gente que todos los años acudía a Roma para celebrar esta nueva solemnidad y como en el mes de mayo resultaba sumamente difícil tener la ciudad suficientemente abastecida de la ingenta cantidad de víveres que la numerosa concurrencia de forasteros demandaba, otro Papa, llamado también Gregorio, dispuso que en adelante se celebrase en las calendas de noviembre, fecha más conveniente, porque en noviembre, al estar ya recolectadas las mieses (semillas) y efectuada la vendimia, Roma disponía de provisiones suficientes para abastecer a los peregrinos”.
LA DE LA UPN 152 DE NEZA, UNA FIESTA MUY PARTICULAR
Señaló el maestro Raúl Fraga que, el doctor José Alfredo Hernández Pérez, coordinador general de la Universidad Pedagógica Nacional 152, sede regional Nezahualcóyotl, encabezó los festejos para celebrar a nuestros muertos entre la comunidad universitaria, participando con habitantes y moradores en torno a las instalaciones de esta sede. También participaron la doctora Marisol Elvira Muñoz, responsable de la coordinación de la Licenciatura en Pedagogía de la UPN Nezahualcóyotl, así como la maestra Citlalin Palacio Santos, responsable de la Subdirección Académica de la misma institución.
El evento contó además con el apoyo fundamental de la planta docente y con el personal administrativo, que también se coordinó en el apoyo que en conjunto y como un gran equipo, sacando adelante este evento que encantó a la comunidad universitaria, quienes también −por supuesto− participaron lo mismo en bailes, danzas, cánticos y aportando su talento, creatividad, inteligencia, visión y sensibilidad.

Este evento se vio engalanado con la participación del maestro José García Segura, presidente de la Casa de Michoacán en el Valle de México, quien aportó algunas de las artesanías que engalanaron el montaje de la ofrenda dedicada a nuestros muertos. Así mismo, nos deleitó con la presencia del Dueto Purépecha y música tradicional de Michoacán. De la misma manera, la soprano Maggie Ixta nos deleitó con el impresionante talento que tiene para interpretar tan bella música.
A lo largo de varias calles, avenidas y espacios públicos alrededor de la UPN, se congregaron también gran cantidad de personas para sumarse a este festejo que rescata nuestras raíces culturales, nuestro sentido de identidad y nuestro respeto en el homenaje a nuestros muertos.
Importante destacar que, gracias al invaluable apoyo de las autoridades del Ayuntamiento de Nezahualcóyotl, se contó con personal especializado tanto en cuestiones de vialidad como de seguridad para garantizar el desplazamiento del amplísimo contingente que, con coloridos vestuarios, permitieron demostrar la alegría de quienes hoy cursan la Licenciatura en Pedagogía en esta institución universitaria, así como la Maestría en Pedagogía.
Fue, en resumen, una fecha que marca un registro histórico que viene a incorporar un nuevo espacio de festejo y coparticipación entre autoridades de la UPN, planta docente, personal administrativo y de manera muy especial la comunidad estudiantil. Felicitaciones a todos. VER VIDEO
[1] “¿Cuál es el origen e historia del Día de Muertos en México y por qué se celebra?, Por Rocío Muñoz-Ledo/30 octubre, 2024. https://cnnespanol.cnn.com/2024/10/30/origen-historia-dia-muertos-mexico-por-que-se-celebra-orix/
[2] El origen del Día de Muertos, por: Víctor Joel Santos Ramírez. https://inah.gob.mx/especiales-inah/articulos/el-origen-del-dia-de-muertos
Comentarios recientes